El papel mágico

Aquella noche estaba desesperada. No podía creer lo que sus ojos veían. Todo cuanto hacía salía volando del papel.

Al día siguiente, se lo contó todo a sus amigos y a su familia.

Elena seguía dibujando muchas mas cosas.

Cuanto mas creaba mas dinero conseguía y como era una familia pobre,

no paraba de dibujar.

Dibujó tantas cosas que le ocupaban casi toda la casa.

Sus padres le echaron la bronca.

A Elena se le ocurrió una cosa, coger una goma de borrar de su estuche y borrar todo lo que había dibujado.

La casa se quedó como antes. Compraron muebles y también comida para cada mes.

Txoriak

Egun batean txori bat kable batean jarri zen.
Ondoren txori gehiago etorri ziren.
Bat-batean txori handiago bat agertu zen eta txoriek berataz barre egiten zuten.
Orduan, txori handia txori txikien artean jarri zen.
Txori txikiek ez zuten txori handia egotea eta orduan, hanketan koska egitea erabaki zuten.
Handia erori zen eta txikiek txikiek zerura joan ziren eta lurrera erori zirenean, ez zeukaten lumarik.
Handiak barre egin zuen txikietatik eta orduan txikiek handienaren bizkarrean ezkutatu ziren.

Dira txori batzuek beste txori handi baten barre egiten dutela.

La soledad

Las escuelas estaban vacías y los maestros-maestras no existían aún en aquella época-estaban en paro forzoso.
En la calle no se veía ni un niño.  Yo, como siempre, salí a la calle y me dirigí hacia  la escuela.
Cuando entré, no vi a nadie.
Me fui a casa y se lo conté todo a mi padre.
Yo me fui al parque a jugar al fútbol.
Pero para jugar al fútbol se necesitan niños y para jugar al baloncesto también.
Fui a casa de mis amigos a tocarles la puerta pero no abrían.
Me aburrí y me fui a casa a jugar con mis juguetes.
Después comí y volví a la calle a llamar a mis amigos.
Uno se había roto la pierna, otro se había constipado...
Me di cuenta de que sin amigos no puedes jugar.
De repente me desperté y todo volvió a la normalidad.

El dragón

Tenía ante mí el mapa de la isla.
Sólo me preocupaba una cosa: ese maldito dragón que la rodeaba y que, según decían, se tragaba a todo aquél que intentara acercarse a ella...
Mis amigos y yo fuimos al bosque de la isla en busca de aventuras.
Encontramos una cueva y vimos unas huellas de dragón.
Vimos dos bolas negras dentro de unas blancas, mirámos bien lo que había y era un dragón.
Corrímos hasta la playa de la isla y encontramos una barca.
Rápidamente nos subimos a ella y empezamos a remar.
Pasadas dos horas, encontramos otra isla, cogimos plátanos de una palmera y nos los comímos.
Después, le pregunte a mis amigos si tenían móvil y dijeron que si entonces buscamos ayuda y nos salvamos.